viernes, 9 de marzo de 2018

Transitando con un camagüeyano llamando Eusebio Leal Spengler.



Puede que esta historia haya comenzado cuando a mediados de 1984 la Comisión de Monumentos en Camagüey valoro la necesidad de emprender con mayor ritmo técnico y celeridad obras de restauración de inmuebles en el centro histórico de la ciudad que necesitaban urgente intervención, o se corría el riesgo de perderles.
Contribuyó al proyecto el Instituto Provincial de Planificación Física, IPF, que con la arquitecta guantanamera Berta Sendra Barnet, entonces directora de ese organismo, lideró un grupo de técnicos cubanos y búlgaros, incluyendo la moscovita Marina Popova, especialista en Geografía Urbana, y miembro del Departamento de Aglomeración Principal del propio IPF, quienes trataron de dar coherencia a un plan director para la ciudad cuando muchos aun no estaban identificados en idea y sentimiento con esta obra. También intervino la Universidad de Camagüey a través de su facultad de Construcción donde se encontraba la Dra. Lourdes Gómez Consuegra. Precisamente para definir este tema y con fecha 16 de enero del 1985, Adelante publicó una entrevista con la Popova, quien expuso un repertorio de consideraciones sobre la situación ambiental de Camagüey y la necesidad de lograr un pensamiento coherente para poder recuperar el centro histórico.