Al
cierre del 2015 un catalogo de las Naciones Unidas registraba la
existencia de de 1031 sitios declarados Patrimonio de la Humanidad,
de los cuales 802 son culturales, 197 naturales y 32 mixtos,
distribuidos en 163 países, tal certificado otorgado por la UNESCO
constituye un reconocimiento de la cultura internacional,
pero a la vez supone una gran responsabilidad que debe ser asumida
para garantizar la protección y conservación de esos valores
para el patrimonio de las generaciones futuras.
En
lo que a ciudades se refiere, existe una serie de obligaciones que
deben ser acometidas, como el mantenimiento de los espacios
históricos, la protección medioambiental contra intervenciones
modernas, la restauración y rehabilitación del patrimonio edificado
de carácter monumental y todos aquellos problemas que produce el
hecho de enfrentar una configuración del pasado con la vida actual.