la otra vacuna, cuándo llegá?...

 

De la Covid se ha hablado en los idiomas de todas las geografías. Tanto se ha dicho que sin dudas los periodistas en cada medio de comunicación, a pesar de estilos diversos, ya apenas saben cómo hacer para no repetirse. Nosotros mismos atiborramos nuestras paginas con informaciones y fotografiaras de salas hospitalarias, pinchazos vacunatorios y declaraciones de confianza.

 Es natural, la sociedad precisa de información para saber por dónde andamos y el tema aparte de priorizado es necesario para fortalecer la seguridad del camino hacia la salida de este laberinto pandémico. Una cosa es cierta, y sin temor a repetir lo antes dicho, la presencia de esta epidemia, es sin dudas referencia en la historia nacional para un antes y un después en nuestra forma de ser, pensar y hacer. Se escribirán libros y episodios televisivos. No los veré a la distancia de los años. Tengo esa seguridad. Todos los de esta generación de ahora tenemos esa seguridad. Mañana estará grabado el orgullo de los esfuerzos de los que lucharon y sobrevivieron y del doloroso recuerdo de los que murieron.

Y como los altibajos de la Covid nos está enseñando a enfrentar y actuar frente a las noches y las tormentas, dando de lado a un rosario de preocupaciones e indecisiones que nos roban tiempo para actuar, considero que esta experiencia llega en el justo momento de sacudir esa herrumbre de años que momió una buena parte de la economía nacional y la atención social, cuando fuimos victimas en carrera de decisiones sin conocimientos de los reales problemas que se gestan bajo la superficie y que no se resuelven detrás de un buró.

 

Si, realmente tenemos que cambiar. Pensar y actuar distinto, Desembarazarnos de tanto funcionario inepto e improvisado por cuya causa enfrentamos las dificultades que hoy nos lastran. Basta revisar los libros de incidencias de cada delegado del Poder Popular, las actas de las asambleas con los electores, para darnos cuenta como el vaso se fue llenando hasta su desborde. Planteamientos de vecinos, quejas y reclamaciones de atención y justicia engavetadas en olvido, dádivas de esperanzas nunca cumplidas como ofreciendo favores. Por supuesto que esos polvos han traído estos lodos de los que muchos se benefician.

Y como nuestra ciencia revolucionaria ha logrado con tenacidad y conocimiento de causa efectivas vacunas contra la Covid que nos va aclarando el presente, como la pandemia se constituyó en reto para la enseñanza, y como estos meses de lineas rojas y paginas de héroes nos llenan orgullo y fe, así mismo, con igual disposición de una lucha en que nos jugamos el futuro, debe aplicarse la otra vacuna, la que elimine y borre la vergonzosa lacra de oportunistas que viven del pueblo. Vacuna que nos libre de encubiertas redes del compadreo institucional. Esa es la vacuna que podrá librarnos de revendedores desvergonzados, precios en inflación descocada tanto en la economía particular como estatal, ,Atención eficiente a las necesidades publicas y sobre todo codearse en la calle con la población y transitar sus pisos de tierra.