jueves, 2 de noviembre de 2017

Hace mas de un siglo Camagüey voto contra los EEUU


En febrero de 1901, el senador estadounidense Orville H. Platt, propuso incluir un clausura para regular las relaciones entre el nuevo estado independiente cubano y los Estados Unidos de Norte América, cuyo ejército ocupaba entonces nuestra isla al concluir la guerra contra España. La enmienda recibió el apoyo legislativo del Congreso y de la presidencia de ese país y fue enviada a la Convención Constituyente de Cuba para su aprobación.
La enmienda que por supuesto respondía a los intereses de los Estados Unidos, no contemplaba la jurisdicción de Cuba sobre el territorio de Isla de Pinos; condicionaba a la vez el arrendamiento de ciertos territorios y servicios; reforzaba la intervención política y militar, y restringía las relaciones exteriores, limitando a la vez la deuda pública, o sea, que convertía en absoluta colonia a nuestro país. El 8 de junio el Secretario de Guerra estadounidense exigió a los delegados cubanos a la Convención que la ley debía ser cumplida tal cual fue aprobada por el legislativo, no estando el Poder Ejecutivo de Cuba legitimado para modificarla, por lo que esta enmienda se convirtió en condición de facto para la devolución de la soberanía.
 
Finalmente el 12 de junio de 1901, la Asamblea que conformaba la nueva Constitución de la naciente república de Cuba, reunida en La Habana, debió votar el apéndice, suscitándose numerosos debates pues imperaba una fuerte corriente para favorecer unos los intereses norteamericanos y otros temerosos de la extensión permanente de la intervención militar. Al cabo la enmienda fue aprobada por 16 votos contra nueve. De estos últimos los dos delegados camagüeyanos, Salvador Cisneros Betancourt y el Dr. José Ramón Silva y Zayas no solo votaron en contra sino que no asistieron a la firma del documento.
La primera intervención en la Asamblea la realizó Salvador Cisneros, quien al proponer el voto en contra de la propuesta norteamericana y explicar las causas de su negación a suscribir aquel documento que catalogo de infame dijo que “ con dichas relaciones está de manifiesto que los americanos no vinieron a Cuba puramente por humanidad como pregonaban, sino con miras particulares y muy interesadas” alertó al pueblo para estar preparados pues “ no debemos caer en una celada vendiendo nuestra honra e independencia absoluta, por concesiones que hagamos a favor de los EEUU, sin que por su parte concedan ventaja alguna” y define su posición en un instante de la historia en que el país del norte se erigía como prepotente potencia y no había muchas voces que se alzaran en su contra-Yo por mi parte no renunciaré; y allí me encontrara el Gobierno Interventor, dispuesto a sostener la independencia absoluta y los derechos del pueblo que me ha nombrado; o que el gobierno opresor, dictatorial e interventor, me expulse ¿con qué derecho el senador Platt, ni todo el congreso con el presidente de la república a su cabeza puede disponer de los derechos privativos de Cuba? … ningún cubano permitirá que se cercene un átomo de su territorio y mucho menos que se vulneren sus derechos cohibiendo todas las facultades de una naciente nación, pisoteada su independencia y soberanía absoluta”.
 Salvador Cisneros es muy preciso al desenmascarar al presidente de los Estados Unidos;·”...sin dudas el presidente de la república americana se ha olvidado por completo del puesto que ocupa, para descender al mas vulgar opresor y tiranuelo, oprimiendo la naciente república de Cuba que tantas muestras de abnegación ha demostrado para conseguir su absoluta independencia ... no se atreven a manifestar su idea y propósito franca y lealmente porque se avergüenzan de la intención que traen envuelta en la negociación leonina que proponen, porque seguro están que no se les admitirá y por ello se creen facultados para continuar la intervención y quedarse con la Isla”. Cisneros avizoró para el futuro de los Estados Unidos, hace 116 años, que; “el siglo XX concluirá con su decadencia y no figuraran más entre las naciones de primer orden”-
 Tal parece que la intervención de camagüeyano Salvador Cisneros Betancout fue realizada ayer en el hemiciclo de las Naciones Unidas. Por su parte y poco después, la ciudad de Camagüey fue la única del país en declarar hijos adoptivos a todos los Delegados que votaron contra los Estados Unidos y sus retenciones interventoras.

No hay comentarios:

Publicar un comentario